Desde que tengo uso de razón me han gustado los zapatos. Soy de las personas que cuando conozco a alguien lo primero que noto son los zapatos. Creo que los zapatos de una persona dicen mucho del carácter y personalidad de tal. Unos buenos zapatos pueden hacerte sentir como que puedes conquistar el mundo, pero de igual manera con los zapatos equivocados no puedes ni llegar a la esquina. Los zapatos traen sentido a tu atuendo, si vas a una fiesta y te pones un vestido super lujoso con joyas hermosas y tus zapatos están rotos y son tenis no importa que tan caras sean tus joyas o que tan elegante este tu vestido te verás ridícula, O si eres un corredor de maratones no puedes ir a correr con unas zapatillas de 10 pulgadas porque no llegarás y si llegas tus pies estarán maltratados y llenos de ampollas. De igual manera un soldado que está listo para la batalla tiene que ponerse unas botas especiales todo terreno que le darán estabilidad y protección, con una suela especial que lo mantendrá firme y aunque camine por el desierto sus pies estarán protegidos del calor o del frío y podrá dar pasos seguros hacia su destino. Esta semana estamos hablando sobre la armadura que Dios quiere que nos pongamos. Efesios 6:15 dice y calzados los pies con el apresto del evangelio de la paz. Aquí Dios nos enseña que debemos calzar un fundamento firme TODOS los días. Y cómo nos calzamos con este fundamento? Bueno leyendo y aplicando la palabra de Dios. La Palabra es la que nos da esa estabilidad y fuerza que a diario necesitamos para poder esquivar dardos del enemigo y mantenernos firmes y con la paz que sobrepasa todo entendimiento, (Filipenses 4:7) en caso de que seamos probados o tentados, (Efesios 6:11) Cuando empezamos a ganar esas batallas empezamos a sentirnos mucho mejor de nosotros mismos y empezamos a experimentar la victoria más seguido en nuestras vidas y en la vida de nuestras familias e hijos. Victoria que Jesus quiere darnos. Cuando experimentamos victoria estamos listos para compartir de gracia lo que por gracia hemos recibido así que también obtendremos disposición para compartir la palabra de Dios y nuestro testimonio con otras personas, esto es el propósito de Dios. Así que mi pregunta para ti hoy es esta, ¿qué tipo de calzado te pones a diario?
-Paola Mendez